Ocupame (completa)
y leeme (por partes) el alma
que me compone (hasta rebalsarme)
para entender (inocente)
desde donde crece
el rio
que corre
por mi
cuerpo (fracturado).
Entenderás (por partes)
que nada tiene que ver
(directamente) con
nada.
Ajenos
los otros.
Vacías
las yemas
Fugaz viento
que me mueve
por los extremos
Nunca antes
las letras
se dispusieron
prepotentes
a mecer
la cuna
donde
duerme
la oscuridad
mas recondita.
Podria
escribir
hasta rozar la locura
de esas
de las que
no se suele volver,
o podria estar volviendo
sin saber que vuelvo.
Sin ser la misma que
abandono
la piel.
Hay tantas cosas
que no digo
porque
no se
si todavia
realmente
se crearon las palabras
amantes de
las dualidades,
capaces
de habitar
dos lugares al mismo tiempo.
